Espert sobre delincuentes: ‘Hay que agujerear algunos, que tengan miedo’
El economista liberal y excandidato presidencial argentino José Luis Espert insiste en que la disuasión del crimen comienza por ponerle freno a los delincuentes con «cárcel o bala».
‘‘Cárcel o bala hijos de puta. Basta de impunidad…puta madre vivir así’’ fue el comentario que hizo José Luis Espert sobre los delincuentes hoy. Espert, uno de los liberales más influyentes de Argentina junto a Javier Milei, lleva un par de años sugiriendo que una medida para amortiguar la inseguridad es matar delincuentes. Así tal cual, el excandidato presidencial no simpatiza con los criminales y propone una de dos cosas: que vayan a la cárcel o se mueran. Se pueden rescatar algunas ocasiones en donde el economista legitimó la defensa de los bienes personales y la vida contra los delincuentes, aunque mueran. En noviembre de 2021, el diputado por Avanza Libertad propuso que ‘‘haya un par de chorros (delincuentes) que terminen agujereados para que se caguen’’. Hoy mientras participaba en un espacio del medio Crónica, Espert reiteró su propuesta altisonante tras ocurrir un asesinato en Mar de Plata.
Cárcel o Bala hijos de puta. Basta de impunidad…puta madre vivir así. pic.twitter.com/bmiP3JmMn7
— José Luis Espert (@jlespert) February 7, 2022
Transcurrió que hace dos días Romina Gilardi, una marplatense de 34 años, fue asesinada por un delincuente al recibir un balazo en la espalda. La joven de 34 años tenía dos hijos y era abuela de un niño de apenas un año… Y murió por nada menos que 50 pesos argentinos, menos de 25 centavos de dólar. La policía investiga que el motivo pudo ser otro, pero no hace justicia a la muerte: teorizan que, alternativamente, pudieron matarla por no fiar un refresco a su asesino. Asesinada mientras trabajaba y con dos motivos que desvalorizan totalmente su vida, la muerte causó indignación y la propuesta de Espert fue apresarlos o matarlos. Por su propuesta radical contra el crimen que consiste en reducir el número de perpetradores y disuadirlos mediante el miedo, el economista es investigado por «instigación al delito». Aun así, no se arrepiente y mantiene su postura.