Gobierno argentino reimpone programa de control de precios
En repetidas ocasiones políticas similares en Venezuela probaron no ser efectivas generando escasez de productos y el cierre de cientos de establecimientos.
El Gobierno argentino retomó el programa Precios Cuidados, una medida vigente desde 2014 que ahora incluirá 310 artículos de la canasta básica a precios acordados de antemano, anunciaron el jefe de gabinete de ministros, Santiago Cafiero, y el ministro de Desarrollo Productivo, Martín Kulfas.
«Es un esquema de 310 productos», informó este último funcionario desde la Casa Rosada, sede del Ejecutivo. En promedio los ítems del programa tendrán una rebaja de su precio del 8% en promedio.
El nuevo programa de Precios Cuidados, que tendrá vigencia durante al menos el próximo año y se revisará cada trimestre, prescinde de 430 de los 500 productos que había incluido el Gobierno anterior del expresidente Mauricio Macri (2015-2019).
Es decir, que de los insumos incluidos en esta iniciativa, «sólo continúan 70», corroboró Kulfas.
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Además ingresan otros 240 productos que «mantienen o bajan su precio de hasta el 30%», añadió el ministro.
La secretaria de Comercio interior y encargada del programa, Paula Español, adelantó que la iniciativa incluye «marcas de pañales, marcas de lácteos, (y además) se incorporó la lavandina (lejía) y toallas femeninas», entre otros bienes no contados por la anterior administración.
El Ejecutivo también lanzó una aplicación para dispositivos móviles que tendrá distintas funcionalidades a lo largo del tiempo, y que desde un comienzo permitirá comprobar el listado de precios y los supermercados adheridos.
Con el tiempo, «la idea es incorporar a productores y supermercados regionales», añadió Español.
En un país en el que la inflación superó el 52% interanual a noviembre, el plan del Gobierno espera que los consumidores encuentren en los establecimientos los precios visibles que se hallan en las góndolas, añadió el jefe de gabinete de ministros.
El Ejecutivo pretende así «reactivar la economía y poner de pie la producción nacional y de alimentos», pese a que en todos los países que han impuesto estrictos controles de precios (como Venezuela) enfrentaron escasez de productos.
Los productores, especialmente los más pequeños, que no pueden adaptarse a los controles de precios terminar por tener pérdidas en sus negocios, realizar despidos y finalmente la amenaza de terminar en la quiebra.
Con información de Sputnik.