Involución venezolana, ahora recogen agua en las laderas de montañas
En las zonas aledañas a Caracas, la capital de Venezuela, las personas han tenido que recurrir a recoger agua de las laderas por fa falta de suministro.
En las faldas de la montaña Warairepano (también conocida como cerro Ávila), ubicada al norte de la capital, decenas de habitantes se aglomeraron para llenar bidones con agua, luego que el apagón agudizara la crisis del suministro de este servicio.
«Tengo cuatro horas esperando para agarrar agua, y la voy a usar para cocinar, lavar los platos y para limpiar, aunque tenemos racionamiento, esta vez fue peor, porque desde el jueves no se puede ni comprar agua potable, y no llega nada por el grifo», expresaba Marbella Blanco de 60 años, residente de Pinto Salinas (oeste).
Quienes hacían la fila, llevaban consigo envases plásticos en donde recogían desde uno hasta 20 litros de agua.
«Yo me traje todos los envases que tengo en mi casa para llenarlos de agua, porque ayer no tenía ni para darle de tomar a mis hijos«, señaló a Sputnik Diego Santoyo de 38 años, habitante de El Cafetal (este).
Venezuela involucionando, no hay suministro de agua debido a apagones
Los ciudadanos se concentraron específicamente en la Cota Mil, una avenida ubicada al norte de la ciudad, que colinda con el referido cerro.
En uno de los puntos que recorrió la citada agencia de noticias, los bomberos prestaban respaldo a la población, colocando las mangueras que utilizan para apagar el fuego, en los puntos en los que salía agua a través de tuberías, que se nutren de las quebradas de la montaña.
«Estaremos aquí hasta que la luz del sol nos lo permita», indicó uno de los funcionarios a Sputnik.
Mientras, quienes hacían las filas se distribuían las tareas para hacer más rápido y efectivo el llenado de los envases.
«Aquí nos estamos rotando, unos se encargan de llenar, otros de tapar los envases, y otros de cargarlos, la idea es apoyarnos entre todos, para que la situación sea más llevadera, y todo sea más rápido», agregó Mariangel Soto.
Por las calles de Caracas, en un recorrido que hizo esta agencia de noticias se observaba a los ciudadanos por las avenidas y autopistas llevando bidones de agua, algunos en carretas, otros en moto, e incluso a cuestas.
«Yo tuve que caminar más de tres kilómetros con la carreta para llegar a mi casa, porque aquí en el barrio no tenemos ni una gota de agua«, señaló Carla Núñez a Sputnik, en el sector 5 de Julio de Petare, una favela ubicada al este de Caracas.
Los racionamientos venían desde antes, pero nunca como lo de ahora
Desde el año 2014, en la capital venezolana se aplican racionamientos de agua en muchos sectores, y aunque las autoridades anunciaron en julio de 2018, un plan de recuperación «prioritario de los servicios básicos», la mayoría de los habitantes de la ciudad no cuentan con suministro continuo e incluso los días de racionamiento se ven interrumpidos sin previo aviso.
Las redes eléctricas venezolanas colapsaron el 7 de marzo tras una avería en El Gurí, la planta hidroeléctrica que proporciona el 80% del consumo eléctrico de Venezuela, como consecuencia del desfalco secundado por el régimen de Nicolás Maduro
Derwick Associates, encargada de la instalación de las plantas, no solo incorporó generadores usados, sino que nunca realizaron mantenimientos correctivos. La telefonía fija y móvil tampoco funcionaba en varios estados, según pudo comprobar
El presidente Nicolás Maduro evitó asumir sus erres culpando nuevamente al imperialismo estadounidense de anunciar y dirigir una «guerra eléctrica» contra Venezuela.