The news is by your side.

Parlamento británico declara que actos de China constituyen un genocidio

La Cámara de los Comunes del Reino Unido aprobó por unanimidad una moción que califica como genocidio los crímenes de lesa humanidad que el gobierno chino comete contra las minorías étnicas del país.

10

El pasado miércoles el Parlamento británico (cámara baja) fue llamado a deliberar sobre la delicada situación de las minorías étnicas en China. Dependiendo del voto parlamentario, el órgano legislativo podría unirse al movimiento internacional de otros países para ejercer presión sobre China. Tanto la administración Trump como la administración Biden mantuvieron la posición de que los actos de China le caracterizan como un Estado genocida. Después Canadá se unió a la denuncia concluyendo que la represión de China iguala al genocidio y demandó al premier Justin Trudeau declararlo como tal. Exactamente un mes atrás, treinta países (Reino Unido, Canadá, Estados Unidos y la Unión Europea) aplicaron sanciones sobre China por violar los derechos humanos. Hoy formalmente el Reino Unido también calificó los actos de China como genocidio con unanimidad sobre la moción, pero con abstención por parte del Ejecutivo.

Afuera del Palacio de Westminster habían exiliados uigures gritando «Call it genocide!» (¡Llámalo genocidio!) apoyando la moción. ‘‘Cada uno de nosotros, cada uigur, pide al Gobierno británico que vote a favor. Tenemos la necesidad urgente de tener a nuestros parientes de vuelta, que los liberen. Este genocidio se tiene que parar’’ explicó Maria Aiseave —miembro de la comunidad uigur en el Reino Unido— a la agencia EFE. Anteayer Human Rights Watch difundió un informe colaborativo con la Universidad de Oxford que determinó que China comete crímenes de lesa humanidad contra diversas minorías étnicas en la provincia de Xijiang. Esterilizaciones forzadas, abortos involuntarios, desapariciones forzosas, lavado de cerebro asesinatos y trabajos forzados son algunas de las prácticas que aplica China contra sus víctimas.

Ambas instituciones aducen que el gobierno chino busca eliminar tanto la identidad cultural como la religión musulmana de los kazajos, uigures y kirguices.

Este sitio usa cookies para mejorar tu experiencia. asumimos que las aceptas, pero también puedes leer más al respecto. Aceptar Leer más